Las mejores frutas tropicales para probar mientras viajas

La comida mexicana está cargada de color, sabores únicos y el toque picante de sus variedades de chiles. Este colorido y diversidad también se observa en sus frutas exóticas, llenas de matices visuales muy vivos y sabores inconfundibles. ¿Cuáles son las frutas mexicanas que forman parte de la gastronomía local? ¿Creías que conocías el universo de las frutas tropicales? Nombres y sabores sorprendentes como los de estas frutas raras, te van a conquistar:

• Zapote: esta fruta poco conocida es un básico en México, y tiene diferentes variedades. En su exterior, es una fruta mediana y redondeada de piel fina; en su interior, su carne es jugosa y suave como la de la papaya. Tiene un sabor dulce y se emplea especialmente para elaborar mermeladas. Sus dos variedades más famosas: la roja, por su característica pulpa de este vibrante color, y el zapote negro, que se puede comer con cuchara y cuyo nombre viene por su color negro, que parece casi chocolate.
• Tejocote: su sabor agridulce le ha convertido en un básico de la cocina mexicana. Incluso en los hoteles de México reciben con esta fruta a los viajeros, ya que no es muy conocida traspasando fronteras. Redondo y pequeño, parecido a una piedra, se usa en muchos dulces, e incluso para rellenar piñatas.
• Jícama: entre las frutas raras hay una que se lleva la palma, sobre todo porque no se trata de una fruta, sino de un tubérculo. Hablamos de la jícama, originaria de México y cuyo interior es más parecido a un nabo y una manzana. Los mexicanos toman esta fruta con un toque de chile y es una golosina de lo más natural y deliciosa para llevar a la playa.

En República Dominicana existe una comida que es todo un símbolo del país: “La Bandera”. Es de los platos típicos dominicanos más apreciados y se cocina con arroz blanco, habichuelas y carne guisada, acompañado en ocasiones de una ensalada o plátano verde frito. Después de una comilona como la que prepara cualquier local dominicano, es el momento de hincarle el diente a las sabrosísimas frutas de República Dominicana. Y es que no hay postre más perfecto que las ricas frutas dominicanas.

• Jobo: esta fruta típica de República Dominicana es también consumida (aunque con otro nombre) en la zona del Mediterráneo, con el nombre de níspero. El árbol de donde es recogido, el jobo, llega a medir hasta 20 metros, y se pueden encontrar por toda República Dominicana.
• Anón: de la familia de las “annonas” existen diferentes variedades de frutas tropicales producidas en República Dominicana, como el anón. Conocido también como la chirimoya, es una fruta verde por fuera y por dentro tiene una pulpa blanca tan jugosa que puede comerse directamente con cuchara o preparar batidos con ella. Es de las frutas del Caribe que, si se toman en su punto justo, son una auténtica delicia.
• Granadillo o granadilla: pese a no ser una fruta originaria de República Dominicana, está más que aceptada en la comida dominicana. Traída a la isla junto con el zapote mexicano, el aguacate o el níspero, esta sabrosa fruta es perfecta por su versatilidad a la hora de prepararla y hoy día es muy común encontrarla entre las frutas caribeñas que se pueden degustar en el país. Su pulpa blanquecina es perfecta para tomarla en crudo en ensaladas, como en batidos e incluso helados.

Uno de los recuerdos que todo turista se trae de vuelta a casa cuando viaja a un destino como es Costa Rica, es el de conocer un nuevo sabor en las frutas que creía conocer. Hablamos de frutas exóticas como el mango, más conocida e introducida en cualquier lugar de mundo, pero cuyo sabor se disfruta de verdad cuando se prueba en el lugar de donde es originario. ¡Que no se te olvide probar estas delicias en tus vacaciones en Costa Rica!

• Mango: fruta más conocida por todo el globo, que se cultiva y exporta en Costa Rica, y que los costarricenses consumen casi diariamente. Esta fruta no puede faltar en una buena comida típica de Costa Rica. Es perfecta para tomar en crudo acompañada de un poco de chile en polvo y sal, en un batido con leche o agua e incluso pasada por la plancha. Jugosa y con un sabor potente, su versatilidad en platos salados y dulces, le hacen una de las frutas de Costa Rica más consumidas.
• Mangostán: una de las frutas tropicales más cotizadas, gracias a su potente sabor y su llamativo aspecto. Por fuera morada y por dentro blanca como la nieve, fue una fruta que los exploradores europeos deseaban pero a la vez era complicada de transportar. En el siglo XVIII lograron cultivarla en zonas como Inglaterra, y ahora puede verse fuera de las fronteras costarricenses.
• Tamarindo: esta fruta no sólo da nombre a una de las zonas de Costa Rica preferidas por los viajeros, la ciudad de Tamarindo, sino que también es el nombre de una de las frutas tropicales con un sabor potente. El tamarindo es una vaina cuya jugosa pulpa de color marrón tiene un sabor ácido cuando está cruda, y más dulce al madurar. Su potente sabor es para los más valientes, ¿te atreves?

Aruba es un paraíso como ningún otro, y tanto su comida como sus árboles frutales tropicales no podían ser menos. Descubre las frutas raras que forman parte de la comida de Aruba. Te prometemos que no querrás probar otra cosa durante tus vacaciones en Aruba.

• Coco: quién diría que pudiera existir un lugar en el mundo holandés pero cuyo paisaje estuviera formado por cocoteros. Eso es lo que ocurre en Aruba, perteneciente a las Antillas Holandesas, pero bañadas por el mar Caribe. Sus cocos son el alimento y la bebida principales en la pequeña isla, y uno no puede volver de un viaje a Aruba sin probarlos.
• Maracuyá: si bien esta fruta no es propia de la isla arubana, el maracuyá procedente de Perú es importado a la isla durante todo el año, donde forma parte indispensable de la gastronomía de Aruba y que se puede disfrutar junto con los quesos típicos holandeses, propios de la tradición del país. Una combinación singular pero exitosa.
• Piña: otra fruta mundialmente conocida pero que en Aruba cobra protagonismo, no sólo por producirse en la zona, sino porque además es el complemento perfecto de una foto veraniega. Su sabor ácido la hace perfecta en platos dulces y salados, y acompaña tanto al local como al viajero en unas vacaciones en esta isla. Una piña colada, y a disfrutar de las vistas.