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Las mejores piscinas naturales de Canarias
Además de sus paradisiacas playas, el archipiélago canario cuenta con un gran número de pozas en las que darse un chapuzón supone una auténtica experiencia para los sentidos. En este artículo seleccionamos para ti las mejores piscinas naturales de Canarias
Las piscinas naturales son un fenoménomo natural excepcional en los que hasta el océano Atlántico se relaja. Se forman de manera espontánea, sin la intervención del hombre (más allá de los elementos para facilitar el baño como escaleras o pasarelas), cuando el agua del mar entra en espacios estancos y están abiertas a todo el mundo. En las Islas Canarias hay más de 60. Pero como sabemos que es difícil elegir entre tantas, te lo vamos a poner fácil: nos tiramos a la piscina y recorremos el archipiélago en busca de las mejores piscinas naturales de Canarias, y las encontramos en las islas de Tenerife, Gran Canaria, El Hierro, Lanzarote, Fuerteventura, La Gomera y La Palma.
El Caletón de Garachico, en Tenerife: la más bonita de las piscinas naturales de Canarias
Dónde: junto al castillo de San Miguel, del siglo XVI, en uno de los cascos históricos más bonitos de las islas, se encuentra El Caletón de Garachico; junto a una piscina pública anexa, la Playa del Muellito y el nuevo puerto.
El baño: (o mil), frente a los enormes acantilados de La Culata con vistas premium a la costa norte de Tenerife.
Acceso: fácil.
Un dato curioso: El protagonista indiscutible de estas piscinas naturales es un imponente roque, símbolo de la erupción del volcán Trevejo, que arrasó Garachico en 1706.
Para dormir: a unos 45 minutos en coche, la capital de Tenerife es un lugar estratégico para recorrer la isla al completo, por lo bien conectado que está en guagua o tranvía. También es un buen punto de partida de tu viaje a Tenerife para visitar otras islas como La Palma, La Gomera o El Hierro. Una buena parte de la oferta cultural de la isla está aquí. Disfrútalo en el hotel Occidental Santa Cruz Contemporáneo.
El Caletón de Guarachico, en Tenerife
Charco Azul, en La Palma: un 'must' que visitar en Canarias
Dónde: en la zona norte de la isla bonita: en la costa del municipio de San Andrés y Sauces, en La Palma.
El baño: Su nombre ya nos los dice todo sobre el color de sus aguas. Se trata de una piscina de grandes dimensiones protegida de oleaje y muy bien equipada con una piscina infantil con fondo liso y una charca con un poético nombre, el “Charco de las Damas”. También cuenta con una pequeña cascada y vegetación, solárium, duchas, vestuarios y aparcamientos.
Acceso: fácil.
Un dato curioso: en el pasado ganó el Premio Ecoplayas por la calidad de sus instalaciones.
El Charco Azul, en La Palma
Charco del Conde, en La Gomera: una piscina rodeada de paisajes espectaculares
Dónde: Valle Gran Rey, La Gomera.
El baño: Si buscas tranquilidad y unas vacaciones relax en Canarias, esta es tu lugar. El Charco del Conde se transforma con la marea y pasa “de lago” a “charco”, por lo que es una piscina natural en Canarias recomendada para disfrutar en familia.
Acceso: sencillo.
Un dato curioso: El Charco debe su nombre al señor de la isla después de la conquista castellana del siglo XV.
El Charco del Conde, en La Gomera
Charco Azul, en El Hierro: perfecta para una escapada romántica
Dónde: El Golfo, valle impresionante de la costa escarpada en esta pequeña isla canaria de gran belleza e increíbles fondos en los que hacer buceo en Canarias.
El baño: Aunque este espacio bien podría haberlo diseñado un gran arquitecto, la propia Naturaleza fue la responsable, aprovechando las coladas de lava. Te sentirás en otro planeta por el sonido envolvente del mar de El Hierro.
Acceso: fácil a pie.
El Charco Azul, en El Hierro
Las Salinas de Agaete: una de las piscinas naturales de Gran Canaria que no te puedes perder
Dónde: en Agaete, famoso por sus restaurantes. Junto a un palmeral y huertas cultivadas.
El baño: en un castillo infranqueable, con singulares pilones de hormigón a modo de almenas se dan cita tres piscinas naturales. Gran Canaria refleja en ellas la increíble belleza de paisaje costero y sus inolvidables atardeceres.
Acceso: fácil. A pie, desde la Avenida Paseo de los Poetas, o en coche, desde la calle de El Muelle (hay aparcamiento).
Un dato curioso: Puedes pasar de unos charcos a otros por tubos volcánicos.
Dónde dormir: Recarga pilas para otro día de aventura en el hotel Occidental Margaritas, en plena playa del Inglés.
Las Salinas de Agaete, en Gran Canaria
Los Charcones, en Lanzarote: un rincón único en la isla de los volcanes
Dónde: en el sur de la isla, a cinco minutos en coche de Playa Blanca, un imprescindible que ver en Lanzarote.
El baño: en cualquiera de las piscinas vírgenes de diversos tamaños, profundidad y formas que decoran los dos kilómetros de costa de Lanzarote desde el faro de Pechiguera hasta el norte, en dirección a Janubio. Puedes aprovechar también para pedalear por el interior y descubrir algunos de los paisajes de Lanzarote que ofrece la isla para impactar al visitante.
Son habituales los vientos propios de esta isla y oleaje por el mar abierto.
Acceso: pista de tierra.
Dónde dormir: hazlo como un bebé en el hotel Occidental Lanzarote Mar, en Costa Teguise.
Los Charcones, en Lanzarote
Aguas verdes, en Fuerteventura: viaje a otro planeta
Dónde: Playa del Valle, Betancuria, un rincón precioso que hay que visitar en Fuerteventura.
El baño: paraje rocoso en la isla de la arena. Se ubican en una zona de gran oleaje y sin embargo, una vez en las piscinas, se te olvida. Seis kilómetros de charcos y entrantes, sin huellas humanas.
Acceso: por carretera de asfalto (última señal humana en el camino) y pistas de tierra.
Dónde dormir: Para el descanso, el hotel Occidental Jandía Royal Level - Adults only, a 400 metros de la espectacular playa de Jandía, con vistas al mar, te encantará.
Un dato curioso: verás ardillas locales y grandes cangrejos sobre las rocas.
Mete el bañador en la maleta y lánzate a descubrir las piscinas naturales de Canarias. Elige una ¡o conócelas todas!
Aguas verdes, en Fuerteventura
