Qué hacer en Bilbao en un fin de semana

El botxo (como cariñosamente llaman los bilbaínos a su ciudad) se encuentra entre montes, por lo que es el destino perfecto para contemplarlo desde un punto de vista diferente y, ¡muy alto! Si no le temes a las alturas y eres atrevido, no dejes de apuntarte estas tres opciones.

1. Monte Artxanda: desde su cima podrás conseguir una de las panorámicas más bonitas de la ciudad. Accediendo a pie, en coche o en funicular encontrarás un espacio donde el deporte, la gastronomía y las zonas verdes son las protagonistas. Un plan perfecto que hacer en Bilbao para contemplar la ciudad desde lo más alto y disfrutar de unas vistas panorámicas desde su mirador con amigos, familia o en pareja.

2. Puente de Vizcaya: 61 metros de altura te separan de una de las mejores vistas de la ciudad. El Puente de Vizcaya separa los municipios de Portugalete y Getxo y es una visita obligada en tu viaje a Bilbao, no solo por la perspectiva, sino también por experimentar la sensación de sentirte el rey del mundo sobre la ría del Nervión.

3. Terraza del Guggenheim: después de visitar uno de los museos más conocidos del mundo, te proponemos al ir a Bilbao contemplar la zona centro desde la terraza del Guggenheim. Además de sorprenderte con las vistas, podrás degustar la gastronomía local mientras recargas pilas para seguir descubriendo los rincones de la ciudad.

En cualquier lugar del mundo los atardeceres son uno de los grandes regalos que nos concede el viajar. Bilbao no iba a ser menos, y las puestas de sol en la capital vizcaína son esenciales en tu visita a la ciudad. Esta puede presumir de paisajes preciosos.

4. Galea: si eres de emociones fuertes, sin duda este es tu sitio perfecto para contemplar uno de los mejores atardeceres de Euskadi. En el municipio de Getxo, este gran acantilado reconvertido en paseo costero es un lugar imprescindible para desconectar viendo una puesta de sol. Además, mientras esperas a que el sol se oculte, puedes aprovechar para visitar el molino de Aixerrota y el Fuerte de la Galea, dos lugares emblemáticos de la zona.

5. Puente de la Salve: Bilbao es ciudad de puentes, y en estas recomendaciones de atardeceres, no podíamos olvidarnos de uno de los puntos estratégicos para ver una puesta de sol en pleno centro de la ciudad. Cerca del Guggenheim, desde aquí podrás admirar cómo, en combinación, la ría de Bilbao, la arquitectura de la ciudad y el sol nos regalan un atardecer mágico.

Conocer una ciudad, aunque sea a lo largo de un fin de semana, incluye también catar su gastronomía y sabores, por eso es casi obligatorio probar platos y especialidades de la tierra que te encantarán y querrás saborear una y otra vez. Para saber qué hacer en Bilbao hay que empezar conquistando al paladar, ¿te apetece un pintxopote para abrir el apetito?

6. Pintxopote: no puedes irte de Bilbao sin hacer una ruta de pintxos por diferentes bares de la ciudad. Lo ideal es degustar uno o dos en cada bar y así ir recorriendo cada uno de ellos como cualquier bilbaíno de pro. Nuestra recomendación es ir de pintxopote por la zona del casco viejo de Bilbao. Desde la Plaza Nueva y por las calles de alrededor te esperan dos o tres horas frenéticas donde la comida y la bebida son las protagonistas. Y ojo, si prefieres algo más tranquilo, los hoteles en Bilbao tienen una gran oferta de pintxos a los que no te podrás resistir. Además, este puede ser tu alojamiento perfecto para descansar después de un duro día por las calles de la ciudad.

7. Momento dulce: aunque los pintxos le roban gran protagonismo a la pastelería local, siempre queda sitio para algo dulce. Las carolinas, los bollos de mantequilla o los pasteles de arroz son los más conocidos, pero te aconsejamos que te dejes sorprender por la gran oferta pastelera de la ciudad.

Hay determinadas cosas que un bilbaíno tiene que hacer una vez en la vida, y, ¿qué mejor forma de sentirte uno más que experimentarlo tú mismo? Te ayudamos a que por uno o varios días seas como uno de ellos de principio a fin.

8. Visitar el estadio San Mamés: Si hay algo identificativo de la ciudad es el Athletic de Bilbao, su equipo de fútbol y una referencia de los valores de la ciudad y del pueblo bilbaíno. Visitar el nuevo estadio San Mamés (conocido internacionalmente como La catedral del fútbol) es algo esencial en un viaje a Bilbao por la gran fiesta del fútbol que allí se vive. Aun así, si no eres un gran aficionado al fútbol siempre te puedes quedar por los aledaños del campo o por la zona de Pozas (en la calle Licenciado Poza) para disfrutar del ambiente de un día de partido y disfrutar de un fin de semana en Bilbao. 

9. Subir al Pagasarri: uno de los montes más conocidos de Bilbao es el Pagasarri y todo bilbaíno que se precie tiene que subir (a pie) al menos una vez en la vida. Si eres aventurero y decidido sin duda este es tu plan perfecto. Además, la subida tiene premio porque desde allí contemplarás una de las vistas más bonitas e inolvidables de la ciudad. Ya sabes qué hacer el fin de semana en pareja si te desplazas aquí.

No podíamos acabar nuestro viaje a Bilbao sin acordarnos del mar, uno de los grandes atractivos cerca la ciudad. Pasear por la arena y sentir la brisa del cantábrico no puede faltar en un viaje al norte de España.

10. Playas de Arrietara-Atxabiribil: semiurbanas y situadas en el municipio de Sopela (a solo 13,5 km del centro) estas dos playas en una son perfectas para desconectar de la ciudad. Un gin-tonic en alguno de sus bares, o un paseo por su fina arena recargarán tus pilas para continuar descubriendo lo que ver en Bilbao.

11. Playa de Gorliz: De gran extensión y muy segura, es una de las playas más indicadas si se viaja con niños. Se encuentra en pleno centro urbano, rodeada de un bonito paseo marítimo. Cuenta con un amplio aparcamiento a pie de playa, por lo que es una buena opción para darse un chapuzón rápido antes de despedirse de la ciudad del Nervión.

12. La playa de Las Arenas: esta es la playa más cercana al casco urbano de Bilbao.  Se sitúa en Getxo, en el Abra de Bilbao, a pocos metros del Puente de Bizkaia, también conocido como el puente de Portugalete, declarado monumento Patrimonio de la Humanidad. Se encuentra muy cerca del club marítimo y está muy bien conectada. También cuenta con un aparcamiento, por lo que si vais en coche, es también una buena alternativa.