¿Qué ver en Estambul? Cinco lugares que no debes perderte
Te contamos cuáles son los mejores rincones que ver en Estambul. Si te preguntas dónde viajar, esta escapada a Estambul es el destino idóneo
Qué ver en Estambul, una de las tres ciudades transcontinentales situadas con un pie en Europa y otro en Asia –las otras dos son Atirau, en Kazajistán, y Oremburgo, en Rusia- es una díficil cuestión ya que esta urbe es, sin duda, la más hermosa de las tres. Capital del Imperio romano de Oriente así como del Otomano, la antigua Constantinopla ofrece una mezcolanza de arquitecturas, religiones, culturas y sabores que la convierten en un destino privilegiado ya sea para quien se plantee un viaje a Turquía como para cualquier tipo de viajero. No es la actual capital de Turquía –Ankara posee ese título-, pero decía Napoleón que “Si la Tierra fuese un solo estado, Estambul sería su capital”.
Qué ver en Estambul: Los cinco imprescindibles en tu viaje a Turquía
Estambul: Turismo, cultura y religión en La Mezquita Azul y Santa Sofía
Sin duda es uno de los perfiles más reconocibles de la ciudad con su bosque de minaretes y uno de los lugares imprescindibles que ver en Estambul. Separadas por un parque, está de un lado la Mezquita Azul o mezquita de Sultán Ahmed, la única de la ciudad que posee seis minaretes, y del otro Santa Sofía, antigua basílica ortodoxa, catedral católica, mezquita y ahora museo, que resalta por su peculiar color y su impresionante cúpula.
Si quieres visitarlas por dentro deberás tener en cuenta algunas cosas que son habituales en muchos lugares que ver en Estambul. La mezquita azul sigue usándose para la oración por lo que, aunque la entrada es libre, está limitada por los horarios de rezos y exige descalzarse y no vestir prendas cortas. En cuanto a Santa Sofía, su entrada es de pago aunque merece la pena detenerse en contemplar su majestuoso interior.
Al salir, simplemente pasea. La plaza de Sultahnamet ofrece decenas de rincones desde los que contemplar estos dos impresionantes monumentos. Además, detenerse aquí al atardecer o con su acertada iluminación durante la noche es un momento impagable para cualquier viajero.
Atardecer en el Bósforo, un must en los viajes a Estambul
El Bósforo es el estrecho, de unos 30 kilómetros, que divide la ciudad entre la parte europea y la asiática y que sirve de unión entre las aguas del Mar de Mármara y del Mar Negro. Existen numerosas opciones para realizar un pequeño crucero por esta zona desde el puerto de Eminonu, junto al Puente de Gálata. Muchos de ellos permiten subir y bajar del barco para ir recorriendo los distintos puntos de interés de ambas orillas.
Eso sí, lo más recomendable es que calcules tus visitas para que el atardecer te pille navegando en el barco. Obtendrás unas vistas impresionantes y sabrás que ver en Estambul estos colores no tiene precio.
Qué comprar en Estambul: explora el Gran Bazar y el Bazar de las Especias
En Estambul existen dos grandes bazares: el de las Especias, también llamado Bazar Egipcio, y el Gran Bazar, el más grande de la ciudad. El primero se encuentra dentro del complejo de la mezquita Yeni Camii y tiene forma de L; en su parte corta cuenta con unos 120 metros mientras en su parte larga es de unos 150 metros. Su olor y colorido lo hacen una visita obligada.
El Gran Bazar, uno de los más grandes del mundo, cuenta con unos 45.000 m² . En su interior tiene más de 60 avenidas y calles y más de 4.000 tiendas. Pero no solo eso; tiene su propia enfermería y oficina de Correos y algunos bancos tienen oficinas en su interior. Lo bueno es que su organización es gremial, es decir, las tiendas de joyería se encuentran en la misma zona, al igual que las de piel, espejos, etc lo que te ayudará a no perderte. No te olvides de que regatear es casi obligatorio, se trata de bajar el precio entre un 30 y un 70%. Ya solo te queda decidir qué comprar en Turquía.
Qué visitar en Estambul: El Palacio Topkapi
Muy cerca de Santa Sofía se encuentra el Palacio Topkapi, sede central del Imperio Otomano que contiene una riqueza ornamental impresionante lo que lo convierte en uno de otro de los lugares obligados que visitar en Estambul. Su entorno rodeado de jardines y fuentes y patios eleva la superficie total del complejo a unos 700.000 m², rodeados por una muralla bizantina. Además de un relajado paseo por sus padres, resaltan las salas del tesoro, las cocinas y el harén.
Además, desde aquí tendrás unas sensacionales vistas del Bósforo.
La Torre y el Puente Gálata con las mejores vistas al Bósforo
El Puente, uno de los más transitados de Estambul, une el Sultahnamet con Beyoğlu, uno de los barrios de moda de la ciudad. Cuenta con dos niveles, el superior, dedicado a coches y con un paso peatonal, y el inferior, en el que se encuentran innumerables bares y restaurantes en los que disfrutar de inmejorables vistas.
En uno de sus extremos y tras un pequeño recorrido entre callejuelas se encuentra la Torre de Gálata con sus 60 metros de altura y que actúa de mirador del Cuerno de Oro, el estuario en la entrada del Bósforo. Aunque la actual torre no es la misma que la antigua torre bizantina con el mismo nombre que se encontraba en otro lugar de la ciudad -en el extremo norte de la gran cadena que cerraba la entrada del Cuerno de Oro- y que fue destruida en la Cuarta Cruzada.